¿Puede
un solo demonio dominar el mundo?
La
gran mayoría responderían que no, pero L.A. tiene una idea muy diferente. Con
sus alocadas genialidades, improvisa un plan que hará temblar los cimientos de
la realidad. Pero… ¡por el amor de Dios! El ser supremo no se va a quedar de brazos
cruzados, en parte porque Lucifer le ha pasado el soplo.
Desde que leí a Juan José Millás en su obra “No mires debajo
de la cama” no he leído un libro tan “loco” como este. “Esos rollos
sobrenaturales” es una explosión imaginativa con derroche de buen humor.
Lo primero es decirte a ti, lector, que si vas a leer este
libro tienes que hacerlo con la mente abierta, este libro es una caricatura de
la vida misma, es un sarcasmo continuo, una ironía sin fin. En sus páginas, el
autor analiza la vida pasando lista a políticos, a la iglesia, el papel de las
redes, el periodismo, las dependencias…, el amor, el sexo incluso. Todo pasa
por el microscopio y nos lo entrega a través de una metáfora inmensa.
Tanto el cielo como el infierno están gobernados por dos
seres que se disputan el poder: Dios y el diablo. El mundo es una gran empresa
de la que ambos tienen que sacar rendimiento, los humanos son sus trabajadores, manejados al antojo. Hay insurrectos, intrigas, deslealtades…
Como en la vida misma.
La trama está perfectamente organizada, el autor no deja
nada a la improvisación. Es una aparente locura dentro de la coherencia que el
autor quiere darle.
Los personajes están muy bien definidos, sorprendentemente
bien definidos. A lo largo de los dos libros, sabemos cómo reaccionarán cada
uno de ellos, los conocemos.
Una pregunta que me hago y no se entenderá hasta no leer los
libros es: ¿Dónde acaba la obra, antes de la nota de autor o después de ella?
Realmente no quiero saber la respuesta, prefiero mantener la magia de la
incógnita. Voy a dar un paso más, después de hablar con el autor me pregunto si
él mismo lo sabe.
Estamos ante una lectura disparatada con una pretensión: denunciar a la sociedad actual, a la corrupción que nos rodea y nos ahoga, las manipulaciones en cubierta que nos llevan de un lugar a otro. El descontento en general de la sociedad.
—La primera pregunta al autor es obvia: ¿quién se esconde tras el
seudónimo de “Señor Plátano”?
—Alguien que dice lo que nadie dice. Ese es quien se esconde
detrás de mi seudónimo, alguien que denuncia de forma crítica lo que le rodea.
—¿Para qué tipo de lector escribes, para quién escribes?
—Mi público es toda aquella persona dispuesta a divertirse,
eso es sustancial en mi obra. Tal vez no sea un público específico, simplemente
sea alguien que quiera reírse de algo sin importarle qué.
Lo que tengo claro es que escribo para que el lector se
cuestione, luego se informe, averigüe y obre en consecuencia.
—¿Crees que la literatura puede cambiar el mundo?
—El día que tengas gran notoriedad como escritor, cosa que no dudo ni por un momento, ¿crees que dejarás de ser tú?
—Si llega ese día, mi sueño es que hagan de mi libro una
serie en Netflix (risas). Eso sí, espero que realmente no se pervierta mi obra como
le ha sucedido a Neil Gaiman con su American Gods, su libro tiene un mensaje
que no aparece en la serie. Yo temo a la fama no por lo que pueda hacerme a mí,
sino por lo que pueda hacerle a mis libros. Me dolería si de mi obra se hiciera
una serie mala, me dolería, eso lo tengo en el corazón, me dolería.
—Algo que añadir
—Estos libros son una crítica incisiva a la política. Supongo
que muchos católicos se sentirán dolidos por lo que lean en ellos, pero lo que
pretendo es que se cuestionen. Yo hago una crítica desde el respeto, para
reírnos primero y después para instar a cuestionarnos lo que nos rodea. Yo
mismo disfruto si la gente me dice: “Estas equivocado”, en ese caso, si me lo
razona, yo me lo cuestiono, me gusta pensar.
Mis libros van al margen de la ideología, son libros que exhortan a averiguar. Quiero producir un shock en los lectores, la vida parece perfecta, crees conocer a quienes te rodean y no te esperas lo que está detrás de cada uno porque no contrastas la información que te llega.
Veo los dos libros que podrían pertenecer a una saga mucho más
larga, seguro que la imaginación del autor hará que no le falten argumentos
para nuevas tramas con los mismos personajes.
Solo me queda dar las gracias al autor por haberme enviado ambos
ejemplares ¡Y dedicados! Estoy convencida de que va a ser un escritor
reconocido, y yo presumiré de sus simpáticas dedicatorias.
©Manuela Fernández Cacao. Todos los Derechos Reservados.
Pues habrá que ver eso.
ResponderEliminarSalud.
Hola Manuela.. Interesante lo que explicas del libro y del autor. Me gusta esa definición que hace sobre si la literatura puede cambiar el mundo, las posturas pedantes nunca cambiarán nada..
ResponderEliminarUn abrazo y siento mi falta de presencia en los Blogs..
¡Me ha encantado la propuesta y la entrevista! Besos :D
ResponderEliminarGracias por el comentario. Un abrazuco
ResponderEliminarManuela, muy interesante la presentación, como siempre, pero lo que más me gusta es la faceta de entrevistadora.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que buena periodista , entrevistadora hubieses sido , que tiemble María patiño
ResponderEliminarOye la de María Patiño , era yo flor lo que pasa que se a publicado antes de terminar besos de flor🥰🤗🏵️
ResponderEliminarMe hacéis reír. Besissss...
EliminarEl humor, la ironía, incluso el sarcasmo, me gustan si se parodia una realidad digna de ser criticada. Esta obra, sin duda, promete pasarlo bien para los lectores a quienes les guste el género humorístico y la crítica despiadada, je,je.
ResponderEliminarUn abrazo.
Magnífico, me quedo con la respuesta a la pregunta de ... "algo que añadir".
ResponderEliminarMi amigo Juan los leyó ... admirado.
Un abrazo, Manuela.
Gracias por la reseña , Enamorada de las letras
ResponderEliminarme maravillas
ResponderEliminarcomo siempre
dejándome sin palabras
Una lectura a tener en cuenta.
ResponderEliminarBesos.