"Casa dividida" - Antonio López-Peláez - Reseña

 

“Casa dividida”

Autor: Antonio López-Peláez

Editorial: Extravertida Editorial

De venta en Amazon y otras librerías

 

SINOPSIS

En la ciudad de Belfast, tras la firma de los acuerdos de paz que han puesto fin a más de treinta años de violencia indiscriminada, un periodista cultural venido a menos, un músico experimental reconvertido en traficante de drogas y un columnista de prestigio amenazado por una facción que se resiste a abandonar las armas tratan de salir adelante a duras penas en un ambiente tenso y enrarecido en el que todo el mundo proclama que las cosas han cambiado, pero nadie termina de creérselo.

 

Esta obra tiene una pretensión: mostrar a los lectores la sociedad de Belfast en un momento muy determinado de su historia. Una sociedad que parece pender de un hilo, y que describe el autor a través de la cotidianidad de tres personajes centrales.  

El lector no debe buscar en este libro una trama entre tres personajes, prácticamente no hay argumento narrativo, lo que hay es la imagen del país, de ahí que no haya mucha fluidez en el transcurso de la obra sino una "impresión", una "estampa" de una sociedad.

Antonio López-Pélaez, describe cómo subyace la conmoción política en todo aquello que sucede en la ciudad. Los duros acontecimientos han calado dentro de cada ciudadano, se percibe en todo lo que ocurre, en lo que se habla. Los rencores entre protestantes y cristianos no dan tregua y salpican cada minuto y cada rincón.

Escenas descritas con todo lujo de detalle, a modo de fotogramas. Lenguaje sencillo.

La portada me resulta espectacular, el título muy apropiado y el final me ha gustado sobremanera, nos deja un sentimiento de haber asistido a una temporalidad corta en Belfast, sin un comienzo ni final, simplemente hemos sido observadores de una circunstancia.

 

¿Qué te motivó a escribir esta novela?

—Existen muchas -probablemente demasiadas- sociedades divididas; pero una sociedad dividida como la norirlandesa, que ha acabado encontrando en la división misma su principal seña de identidad y razón de ser... Eso resulta un tanto inusual. Y deprimente. Una combinación a la que, al menos en mi caso, es difícil resistirse.

 

¿Te llevó mucho tiempo documentarte?

—Haber vivido en el Ulster me ha dispensado, en cierto modo, del proceso de documentación al uso. Me he limitado a ver, oír y callar, un método ciertamente rudimentario pero aprovechable si se prolonga lo suficiente en el tiempo.

 

Has recibido un premio literario ¿se siente presión después de haberlo recibido ante la siguiente publicación?

—Hace ya más de treinta años que gané mi primer y único premio, de manera que mis recuerdos al respecto son bastante borrosos. En cualquier caso, dudo que me sintiera presionado: siempre me han producido más ansiedad los fracasos que los éxitos.

 

Cuando escribes ¿hasta qué punto es importante para ti el lector?

—No soy uno de esos escritores que escriben (o al menos eso dicen) exclusivamente para sí mismos. Siempre que escribo tengo en mente a un lector, y siempre presupongo que éste es más inteligente que yo, lo cual me obliga a emplearme a fondo para, dentro de mis posibilidades, dar la talla.

 

De todos los libros que has publicado ¿Hay alguno por el que te sientas especialmente satisfecho?

—A decir verdad, no lo hay. Leídos a posteriori, todos ellos, sin excepción, me parecen versiones torpes y deslavazadas de lo que en principio tenía en mente. El mejor libro, pues, siempre es el próximo. El que aún está por escribir; o más bien por estropear.

 

Esta vez a la pregunta "algo que añadir" soy yo, Manuela, quien añade. Y lo que añado es el agradecimiento a Antonio por haberme enviado su obra para que le diera mi opinión. Decirle que la he leído con sumo interés. Sin él saberlo, los libros históricos novelados o no, resultan entre mis lecturas favoritas. 
No será esta la única obra que lea de su autoría.

Casa dividida, fotograma de un momento histórico.

©Manuela Fernández Cacao. Todos los Derechos Reservados.