SE BUSCA
Se busca oso, va acompañado
de un madroño, la última vez que se vio fue en la Puerta del Sol de Madrid, ha
desaparecido dejando únicamente restos de su peana.
El motivo de su huida está claro,
nuestro oso, el símbolo de la villa, no ha resistido la presión de vivir en
esta ciudad y ha decidido poner tierra de por medio.
Y no nos extraña, en absoluto,
porque es lo que haríamos la mayoría de los madrileños si pudiéramos: marchar a
vivir allá donde la supervivencia no empezara a ser un imposible.
Ya lo teníamos difícil cuando la vida era “normal”, estábamos acostumbrados a sufrir las manifestaciones de todas las comunidades autónomas en nuestras calles, con lo que eso supone, callábamos; estábamos acostumbrados a los atascos nada más caer tres gotas de lluvia; acostumbrados a la polución, a las aglomeraciones... pero con todo éramos felices.
Desde que vino la pandemia, nada
más empezar, fuimos de los más azotados, como somos "centro de reunión estatal" se celebraron aquí todas las reuniones habidas y por haber días antes del
confinamiento; hablando de confinamiento, en octubre nos confinaron
perimetralmente 15 días, a nosotros solos, decían que teníamos una incidencia
de 500 casos (ahora hay quien tiene más de 1000 y no hacen nada especial por ellos). Nos han
dejado sin vacunas para nuestros sanitarios, justo por ser previsores. Filomena
se ceba con la ciudad, a priori, a pesar de que los ciudadanos no podíamos
salir de las viviendas, el arbolado, los techos de colegios, las cornisas..., nos
quedamos sin palas, sin sal, todo destruido…, pues no querían declararnos zona
catastrófica, les ha debido dar vergüenza y al final nos la han concedido, eso sí,
en cuanto pudieron se llevaron a la UME. Hortensia nos ha dejado vientos de 100
km/h en plena zona metropolitana, siguen cayéndose cornisas y árboles; Una
explosión de gas en pleno casco antiguo con cuatro fallecidos. En el cielo de Vallecas,
a tan solo 84 km de altura, esta noche se han desintegrado los restos de un
meteorito que venía hacia nosotros, directo...
Esto parece el ensayo de un
exterminio.
Mientras que la policía lleva las oportunas pesquisas, los ciudadanos muestran inquietud por tal desaparición.
Le mantendremos informados de cualquier noticia, mientras tanto, no podemos dejar de preguntarnos:
¿Dónde estará nuestro oso?
Texto de ©Manuela
Fernández Cacao. Todos los Derechos Reservados.
En efecto, es osa. Y creo que está bastante hasta de ver gente sin mascarilla y en grupos. No me extraña que se largase.
ResponderEliminarUn saludo.
Desde luego este año no lo hemos empezado con buen pie. Espero que lo terminemos mejor porque hasta ahora no salimos de una cuando estamos en otra. parece que han llegado las siete plagas dispuestas a acabar con nosotros.
ResponderEliminarUn beso, Manuela
En Granada han tenido un buen susto, llueve y ventea para todos. Ya me gustaría vivir a mí en Madrid en lugar de Barcelona, me equivoqué cuando acabé la carrera y me vine aquí. Mi vida hubiera sido otra, sin duda, pero he pensado muchas veces que mejor habría sido Madrid. Saludos.
ResponderEliminarNo es de extrañar que haya cogido el petate y haya huido. Seguro que va acompañado por Neptuno y todos en el carro de Cibeles.
ResponderEliminarYa solo nos falta que vengan los extraterrestres.
Un saludo de una madrileña de adopción.
Buenas Manuela es cierto que parece que el año no ha comenzado con esas esperanzas que depositamos pero bueno habra que irse adaptando al dia a dia. Referente al oso u osa ,que más el sexo es un símbolo de los madrileños y espero que este para los restos y si se ha ido de cuidar que regresara porque de Madrid al cielo , aunque filomena, hortensia o quien quiera se empeñen en fastidiarnos, nosotros seguimos pa delante jaja . Un fuerte abrazo .
ResponderEliminarNo me extraña que haya huído. Un beso
ResponderEliminarSi allá el clima ha hecho destrozos, y se juntan otros elementos de desastre, que huye un icónico oso, aquí las cifras de líderes muertos, apenas iniciando el año, es increíble, a pesar del llamado al gobierno de las entidades internacionales de derechos humanos. mientras se enardece el coronavirus, y las vacunas son una ilusión. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarHola Manuela.. Vaya parece que todos los males solo ocurren en Madrid.. No me extraña que el Oso se haya ido a la sierra..
ResponderEliminarAbrazos.
Una critica artística y magnifica, la capital está de capa caída, esperemos que pronto levante cabeza y vuelva as ser la envidia de todos. Un abrazo
ResponderEliminar¿Es verdad lo del oso?, no me había enterado, pobre Madrid, las cosas que le están sucediendo...
ResponderEliminarQue acabe pronto todo.
ostras, lo del meteorito en el cielo de madrid lo he visto de pasada en facebook, y creía que era de coña.
ResponderEliminarlo de las manifestaciones es verdad, no había día que me acercara al centro para algo y no hubiera algún sarao en las calles.
sobre los fenómenos atmosféricos y los peligros que pueden causar, mejor no hablemos... yo si fuera el oso también me marcharía, sí.
abrazos!
Seguramente estará hibernando en alguna estación cerrada del metro.
ResponderEliminarSalud
Dudo que sea un ensayo de extermino. Es un exterminio y ya.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Pues muy fácil, Manuela, si la cabra siempre tira al monte, vuestro oso se ha ido con ella. Debía estar también hasta los mismísimoa...
ResponderEliminarUn abrazo.
Seguramente el "oso", está haciendo cola para conseguir entradas en la Sala Barceló.
ResponderEliminar¡Que todo podría ser!
Besos.
Eres genial, para hacer la crónica de la Villa, y la posible aventura del Oso más famoso, y el mimo con que los elementos desatados, con el nombre que van siendo bautizados, asola la capital y la autonomía, claro que además Villa rima el apellido del ministro sanitario, que.. tal vez siga los pasos del Oso.
ResponderEliminar¡Menos mal que alguien puso la mano para a 84 km de altura, lo de llegar a vosotros hubiera sido "un golpe bajo" desde lo desconocido.
No pierdas el humor, que tienes la sal del sur.
Un abrazo.
Bueno, desde Valencia diría que es lo que tiene vivir en la capital de la nación, pero aquí se nos ha escapado el murciélago, seguramente están los dos juntos, calentitos en alguna cueva riéndose de todos nosotros.
ResponderEliminarUn saludo
Lo mismo se ha ido al cielo, por lo de "de Madrid al ..."
ResponderEliminarPero seguro que vuelve, seguro.
Salu2.
Pues tal como pintas el panorama en la ciudad, no debería extrañar que haya tomado las de Villadiego...
ResponderEliminarY de seguro que si muchos supiesen dónde está esa villa, cabe que no fuese el único en desaparecer.
Todos los espacios, Comunidades, Países, tienen sus propios problemas o dificultades. Y más en estos tiempos de pandemia.
He vivido en Madrid en los años 60/75... y pienso que aquel "Madrid de los Austrias" ya no es!
Abrazos Manuela.
Wowww, menos mal que vivo lejos
ResponderEliminarde madrid, jaaaa.
Besitos dulces
Siby
¡Hola Manuela! PUes no me extraña que haya huído en busca de un lugar más tranquilo. ¡Cómo está la cosa! Besos cariño :D
ResponderEliminarEse ya no vuelve.
ResponderEliminarCaso juzgado, con saludo incluído para ti Manuela.
ResponderEliminarManuela, la osa se ha largado de Madrid, porque está todo que arde. La casa de Campo y el Retiro están cerrados durante cuayro meses mínimo y quizá se haya ido
ResponderEliminara ivernar allí. O se le han llevado los extraterrestres que viajaban en el ovni mimetizado de meteorito...
Con cariño un abrazo
Es un oso consciente y seguramente escapó para guardar la sana distancia. Los animales son más inteligentes que algunos humanos así que no desesperes, en cualquier momento regresa.
ResponderEliminarUn abrazo Manuela.
No me extraña que haya desaparecido Manuela, la incógnita es ¿A donde se habrá marchado?.
ResponderEliminarAbrazos.